Por qué una Antología


¿Por qué una Antología?
Porque cuando una editorial se arriesga con una Antología, está haciendo el trabajo.
Porque hoy entendemos y sabemos que el rol de una editorial, más allá del negocio de hacer libros, es el posicionamiento y difusión de una obra literaria y de los autores.
Porque como editorial, somos actores relevantes en el campo literario regional, debemos decir algo y, la forma de hacerlo, es reuniendo a autores locales en un libro antológico.
Y Porque estamos conscientes que el arte no tiene nada de ingenuo, por lo mismo es que una recopilación y selección de textos narrativos, es siempre un ejercicio de poder, arbitrario y polémico. Juan Pablo Sutherland lo escribe claro y conciso en la Introducción de su libro A corazón abierto, dice: “Las antologías constituyen operaciones literarias complejas y contradictorias, fundadoras de nuevas perspectivas críticas y, la mayoría de las veces, son objeto de contraargumentación de parte de la misma crítica, de los excluidos o de los propios lectores”.
Ese es el rol de la editorial, dar movimiento al campo literario, propiciar la autonomía del campo, es decir, llegar a todas y todos los lectores, permitiendo que las obras literarias superen a los propios productores y que estas sean consumidas por los lectores, actores primordiales del campo. Así, la selección de textos narrativos, agrupados en un libro antológico, tendrá por objetivo, provocar, excluir, remover la escena literaria local, permitiendo finalmente, un mirarnos, un pensar desde lo local. Superar la tendencia a mirarnos el ombligo.
Pero a su vez, dar valor a las obras seleccionadas y por ende, a sus autores. Porque, como dice Pierre Bourdieu, la obra de arte es un objeto que sólo existe como tal por la creencia (colectiva) que lo reconoce como obra de arte. Por lo mismo, esperamos que este libro pueda proyectar a los autores a nuevas publicaciones.
Antón Chéjov dice que todos pueden intentar escribir, sin distinción de títulos, cultos, edades, sexos, grados de instrucción y situaciones familiares. No se prohíbe escribir incluso a los locos, los amantes de las artes escénicas y los privados de todo derecho. Esta selección de texto hizo eso, convocó a todos, a todos los que escriben, y de ellos, con criterios literarios, se eligieron a unos pocos.
Este libro, el que usted tiene entre sus manos, reúne relatos de temáticas diversas, con historias que destacan la imaginación y la originalidad.
Julio Ramón Ribeyro dice que el cuento debe contar una historia. No hay cuento sin historia. El cuento se ha hecho para que el lector pueda a su vez contarlo.
Y nuestro criterio de selección ha sido finalmente, literario, reunir un conjunto de cuentos que hagan, lo que dice Ribeyro, contar historias.
Y me quedo con las palabras de Monterroso: “Cuando tengas algo que decir, dilo; cuando no, también. Escribe siempre”, porque los autores de esta antología, lo hicieron, escribieron.